El avance tecnológico ha sido notable en los últimos años logrando que la sociedad se comunique y aprenda rápidamente. Sin embargo, ¿todas las formas de comunicación han evolucionado? ¿la tecnología ha mejorado para las personas con diferentes capacidades?
Bien, hay algunas tecnologías que son de gran interés para la comunicación y el aprendizaje de aquellas personas con dificultades visuales y auditivas.
Hasta ahora, los medios tradicionales de información y comunicación para estas personas son el lenguaje de signos, el braille y la dactilología (menos conocido, usado por personas sordociegas)
La lengua de signos es una lengua reconocida legalmente que utiliza un canal viso-gestual para comunicarse. Posee una estructura gramatical rica y puede emplearse para abordar cualquier tema. A diferencia del resto de lenguas, en lugar de palabras utiliza signos (unidades de significado) y queremas agrupados en parámetros (unidades de significado) en vez fonemas (Tenyus, 2019).
En España, los antecedentes de esta lengua se remontan al siglo XVI. En los monasterios de esta época se empezaron a utilizar signos para poder comunicar cosas de importancia debido a la obligación de guardar silencio. Además, los monjes trataban de educar a los niños sordos. Fue Pedro Ponce de León quien comprendió la necesidad de estos niños de expresarse y comenzó a emplear u sistema gestual de comunicación (Tenyus, 2019).
En el siglo XVII, D. Manuel Ramírez de Carrión utiliza la pedagogía de su época para intentar integrar a los niños sordos en la sociedad. Pero es en la segunda mitad del siglo XVII cuando se publica el tratado Escuela española de sordomudos o arte para enseñarles a escribir y hablar el idioma español. Escrito por D. Lorenzo Hervás y Panduro, supone una seña fundamental en la integración de personas sordas al señalar la afinidad entre lenguas (Tenyus, 2019).
El mayor paso a la estandarización de esta lengua se da con la publicación del Diccionario de mímica y dactilología, de Franciso Villabrille. Esta obra incluía 1500 signos descritos (Tenyus, 2019).
En el siglo XIX se abren los primeros colegios de sordomudos y ciegos. Allí se desarrolla la interacción lingüística y social entre estas personas y el inicio del desarrollo de las portolenguas de signos española y catalana (Tenyus, 2019).
La reivindicación de estas lenguas de signos como instrumentos de comunicación propios surge en el último cuarto del siglo XX. Se realizan numerosos encuentros que abren el debate sobre la necesidad del reconocimiento y uso de estas lenguas para garantizar el pleno acceso de personas sordas y mudas a la educación y a la sociedad (Tenyus, 2019).
La dactilología (del griego «daktilos» -dedos-, y «logia» -ciencia-, «ciencia de los dedos») es la representación manual de cada una de las letras que componen el alfabeto. Este alfabeto es utilizado en la lengua de signos y hacen referencia a letras concretas (Gongora, 2011).
El dactilológico es un sistema alfabético que utilizan las personas sordociegas. No es un sistema internacional, cada país tiene el suyo propio. Cada letra se corresponde con una configuración de la mano y de los dedos del emisor, es decir, son distintas posiciones de la mano, representando cada letra del alfabeto. Puede realizarse en el aire orientado a las personas sordas o sobre la palma de la mano orientado a personas sordociegas. Algunas personas sordociegas lo utilizan como sistema de comunicación habitual y otras como sistema de apoyo. Para que una persona sordociega pueda utilizarlo como sistema de comunicación habitual, es imprescindible que conozca la estructura de la lengua oral, es decir, va a ser utilizado principalmente por personas sordociegas postlocutivas (FOAPS, 2019).
El Braille es el sistema de lectura y escritura universalmente adoptado en los programas de educación para personas no videntes o con disfunciones visuales severas, les permite acceder a la alfabetización y también a la composición musical y a la informática. Se trata de un método de representación del alfabeto, números y notación musical, utiliza celdas con seis puntos en relieve, que al ser tocadas con las terminaciones nerviosas de las yemas de los dedos puede enviar información al cerebro (Prevención Salud, 2017).
Su origen se remonta a 1824 cuando es creado por el pedagogo francés Louis Braille (1809 – 1852). Él mismo perdió la vista a los tres años en un accidente en el taller de talabartería de su padre. Su condición no lo apartó de la escuela, convirtiéndose en un caso ejemplar por lograr ser el primero de su clase y conseguir una beca para el Institut National des Jeunes Aveugles de París, una de las escuelas para chicos ciegos más prestigiosas del mundo. Fue en su época de estudiante que Braille comenzó a desarrollar un código táctil que podría permitir a las personas ciegas leer y escribir rápida y eficientemente. Su invento, llamado Sonography, funcionaba al colocar sobre una superficie plana rectangular doce puntos en relieve que, al combinarse, representaban sonidos diferentes (Prevención Salud, 2017).
Posteriormente, Louis comenzó a realizar pruebas más sofisticadas con diferentes posibilidades y combinaciones hasta que encontró la fórmula para reproducir la fonética básica con solo seis puntos en relieve en 1824. Sin embargo, el método no tuvo gran repercusión hasta años más tarde cuando fue siendo adaptado a los diferentes idiomas del mundo (Prevención Salud, 2017).
DISEÑO PARA TODOS
En España, la Fundación SIDAR (seminario para la accesibilidad en la red http://www.sidar.org se ocupa de velar por la accesibilidad en la red, sobre todo en el caso de las personas ciegas. Uno de sus objetivos es regular el uso de las tecnologías y metodologías de acuerdo, para que la Sociedad de la Información sea realmente accesible para TODOS
Se trata de un conjunto de 7 principios para promover el Diseño adaptado para todas las personas y está orientado a diferentes campos de aplicación, es decir, el diseño de elementos arquitectónicos, tecnología, ingeniería, et. Además, también se tienen en cuenta otros aspectos como el coste, la cultura en la que se usará, el ambiente, etc. (Fundación SIDAR, 2019).
Los 7 principios son:
- 1er Principio: Uso equiparable. El diseño es útil y vendible a personas con diversas capacidades.
- 2º Principio: Uso flexible. El diseño se acomoda a un amplio rango de preferencias y habilidades individuales.
- 3º Principio: Simple e intuitivo. El uso del diseño es fácil de entender, atendiendo a la experiencia, conocimientos, habilidades lingüísticas o grado de concentración actual del usuario.
- 4º Principio: Información perceptible. El diseño comunica de manera eficaz la información necesaria para el usuario, atendiendo a las condiciones ambientales o a las capacidades sensoriales del usuario.
- 5º Principio: Con tolerancia al error. El diseño minimiza los riesgos y las consecuencias adversas de acciones involuntarias o accidentales.
- 6º Principio: Que exija poco esfuerzo físico. El diseño puede ser usado eficaz y confortablemente y con un mínimo de fatiga.
- 7º Principio: Tamaño y espacio para el acceso y uso. Que proporcione un tamaño y espacio apropiados para el acceso, alcance, manipulación y uso, atendiendo al tamaño del cuerpo, la postura o la movilidad del usuario.
El CIDAT es el Centro de Investigación, Desarrollo y Aplicación Tiflotécnica de la ONCE. (http://cidat.once.es/) Entra en su catálogo de productos, observa algunos de los recursos disponibles
Según la Fundación CIDAT, ¿Qué tecnologías podemos encontrar para la comunicación?
Para personas con discapacidad visual encontramos:
- Impresoras de braille
- Tablets de braille con acceso a internet.
- Teclados de braille para comunicarse con el ordenador.
Para personas con discapacidad auditiva encontramos:
- Reloj vibrante con despertador
- Audífono traductor starkey
- Story Sign de Huawei (traduce los cuentos a lengua de signos mediante una app)
Fuentes:
FOAPS- Fundación ONCE para la Atención de Personas con Sordoceguera (2019). Sistemas de comunicación Dactilológico. Recuperado de: https://www.foaps.es/la-sordoceguera/sistemas-de-comunicacion/dactilologico
Fundación CIDAT (2019). Catalogo. Recuperado de: http://cidat.once.es/
Fundación SIDAR (2019). Principios del Diseño Universal o Diseño para Todos. Recuperado de: http://www.sidar.org/recur/desdi/usable/dudt.php
Góngora Moraño, M. (2011). Sistemas alternativos de comunicación. Recuperado de: http://mari6986.blogspot.com/p/dactilologia.html
Prevención Salud (2017). Sistema Braille: origen y vigencia del alfabeto para personas con ceguera. Recuperado de: http://blog.prevencionsalud.com.ar/sistema-braille-origen-y-vigencia-del-alfabeto-para-ciegos
Tecnobility (2019). Tecnologías para personas con discapacidad auditiva. Recuperado de: https://tecnobility.com/es/discapacidad/Auditiva
Tenyus (2019). La historia del lenguaje de signos en España. Recuperado de: http://www.tenyus.com/productos-especificos/blog/la-historia-del-lenguaje-de-signos-en-espana_236_7_473_0_1_in.html